julio 21, 2008

Los límites de la ciencia

Estaba un niño jugando con un globo, y se le cayó en el inodoro. Como le dio asco meter la mano, perdió las ganas de seguir jugando y el muy caradura dejó el globo allí mismo. Un rato después, llegó el papá del muchacho, con ganas de echarse una suculenta cagada; con el periódico del domingo en sus manos, ni se dio cuenta del globo que dejó su hijo y se sienta.
Dos horas después, ya leído todo el diario y sus suplementos, revista dominical, etc., el tipo se levanta y ve el inodoro con mierda hasta el borde:
--¡Por Dios, cómo cagué! ¡Que cantidad de mierda!
Asustadísimo, corre al teléfono y llama a su médico. El médico no puede creer lo que está escuchando, y avisa que va inmediatamente a ver el caso ipso facto, que no tire de la cadena. Cuando llega a la casa, el doctor es llevado a ver la evidencia. Y también se asusta:
--¡Tremenda cagada! ¡¡Pero si la mierda llenó todo el inodoro!! Eso es lo que se llama una cagada "Guinness". Seguro que se te desinfló el culo.
--Sin chistes, doctor, estoy desesperado, ¿qué será lo que tengo?
--Todavía no lo sé. Necesito examinar las heces.
El médico saca una espátula de su maletín para colectar un poco de materia fecal. Pero apenas toca la montaña de mierda, el globo explota y vuela mierda para todos lados. Estupefacto, el médico mira a su paciente, totalmente cubierto de mierda y dice expresivo:
--Sinceramente, he visto muchas cosas en mi vida... pero... un pedo con cáscara ¡¡es algo que supera a la ciencia!!

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